miércoles, 30 de mayo de 2012

Derechistas con armas y perseguidos

Es muy común, al menos en mi experiencia, que los señores de la memoria histórica agiten con lo favorable y oculten lo contrario; o que oculten textos, párrafos o hasta los nombres de falangistas o individuos de derechas, como dando a entender una piadosa intención de no perjudicarlos. Ya se sabe que según no sé qué verdades reveladas eran maaaaaaalos, al contrario que los de izquierdas que eran todos-todos, bueniños-bueniños, nunca habían matado una mosca y como no podía ser menos tampoco habían robado nunca ni un alfiler. A otro perro con ese hueso. Yo publico todos los documentos que me aparecen, sean favorables o contrarios a los que me caen más o menos simpáticos. Y ya veremos cual es el balance. A ver si va a ser cierto que los perseguidos y maltratados durante la II República eran los anarquistas y de izquierdas, o más bien lo eran los de derechas y falangistas por los primeros.

El 12 de febrero de 1936 vimos que fue un día en el que se tiroteó a Juan Canalejo y se detuvo al anarquista Ramón Mejuto con un revólver. No fue la última intervención de armas ese día. Sobre las once de la noche iba por la avenida de la Marina en su bicicleta hacia el callejón de Agar, Emilio Seijo Sánchez, de 22 años, mecánico, según dice en un primer momento, para hacer guardia en el local de las derechas, en el de la Unión Regional de Derechas en la calle Real (junto al Pull, callejón del Torreiro por medio) que sería asaltado un mes más tarde por esas buenas gentes de izquierdas. Venían en sentido contrario procedentes de la plaza de María Pita de entender en el tiroteo producido contra el jefe falangista Juan Canalejo, varios guardias de Asalto. Cuando el ciclista tomaba ese callejón de Agar --en cuya parte baja se encontraba la puerta que daba acceso a la Comisaría de Investigación y Vigilancia--, los de Asalto le dijeron que parase. Al apearse de la bici lo cachearon y le ocuparon un revólver. El detenido ofrece ante el juez una versión que no me parece muy creíble relacionada conque encontró el arma en la calle y en realidad no iba al local de la URD a hacer guardia nocturna, sino a cambiar no sé que nombre en el censo... a las once de la noche. Si alguien conoce un centro de izquierdas, anarquista o masónico en donde hubiese necesidad de hacer guardia nocturna al igual que se hacía en las iglesias o en los centros de derechas, que avise, que yo no los conozco. Lamentablemente, este individuo también se benefició de la amnistía que promulga el Frente Popular en cuanto llega al poder y también está sólo una semana en la cárcel. Mis notas.

Al día siguiente, 13 de febrero de 1936, se produce un hecho, uno más, que da idea de la calidad democrática de aquellas izquierdas, de las Juventudes Socialistas en este caso, que se vendieron como defensores de la libertad, la democracia, la armonía con el resto de la sociedad y demás del repertorio habitual. Sobre las once y media de la mañana iba por la avenida de la Marina, Mariano Díaz Roldán, de 27 años, chófer, portando un paquete con candidaturas de derechas. Se le acercó un niñato de 12 a 14 años que pretendió arrebatarle el paquete, pero le dio un empujón y lo impidió. En ese momento se aproximaron otros chicos de más edad, en número de unos doce, que rodearon al chófer con la pretensión de sacarle el bulto, cosa que no consiguieron. Se pudo detener a José María Rey González, de 19 años, fogonero, que si bien no era de los que le echaban mano al envoltorio, formaba parte del grupo. El detenido declara que se encontraba en el local de las Juventudes Socialistas cuando se comentó que las derechas estaban repartiendo propaganda por las calles, así que salió en compañía de otros, dice que para avisar a los repartidores "que anduvieran con precaución pues podrían ser agredidos". Claaaaaaaaaaaaro, claaaaaaaaaaaro... :) También se fue de rositas al beneficiarse de la amnistía que promulga el Frente Popular en cuanto llega al poder. Mis notas.



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